Scythe Lore

Idas de pelota en general y onanismo musical en particular

miércoles, enero 30, 2008

Diez horas

Ya sabeis lo que me gusta la revista Popular 1, a algunos de vosotros os persigo de vez en cuando con un ejemplar en mano y señalándoos algún artículo que me resultó curioso (no siempre de temas rockeros). También sigo habitualmente el interesante blog que César Martín tiene en la web del Popu, llamado DiaWHEE!!!
Pues bien, hace poco revisando entradas que se me habían escapado en el último mes por saturación de curro me topé con esta noticia que me dejó helado. Copio y pego:


5 de Enero 2008

La política estadounidense hoy en día resulta bastante tediosa, pero cada cierto tiempo sucede algo sorprendente que te recuerda que incluso en ese mundillo plagado de oportunistas e hipócritas aún queda gente con principios.
¿Recordáis el film “Mr. Smith Goes To Washington” (aquí titulado “Caballero sin espada”)? En la secuencia clave de esa película, James Stewart pasaba un día entero hablando sin descanso en el senado, en un intento desesperado de combatir contra el sistema. Increíbles las imágenes de Stewart, agotado y sin voz, luchando en solitario en una batalla que parecía perdida de antemano. Bien, pues recientemente ha sucedido algo parecido en América.
El candidato Chris Dodd abandonó un día su campaña para impedir que la administración Bush se saliese con la suya e impusiese una ley que permite que los ciudadanos sean espiados por el gobierno.
En el senado le pusieron las cosas difíciles, y no le permitieron hablar hasta el fin de semana, asegurando así que no recibiría la ayuda de otros candidatos demócratas que probablemente preferirían girar por el país en lugar de acudir al senado para pararles los pies a Bush y su pandilla (los fines de semana son los días clave en cada campaña política). El objetivo de Dodd era frenar la aprobación de esa ley que anularía el derecho a la privacidad de los ciudadanos, y lo haría recurriendo a lo que se conoce como “filibuster”: un senador puede aplazar la aprobación de una ley aprovechando su derecho a la palabra hasta agotar un tiempo determinado.
En este caso, si Dodd conseguía hablar diez horas seguidas, la ley no sería aprobada. Lo lógico en un caso así habría sido que hubiese contado con la ayuda de otros senadores demócratas, para no desfallecer tras cinco o seis horas hablando sin parar, pero NADIE acudió en su ayuda. Obama Superstar, la serpiente Hillary y compañía estaban más preocupados por sus respectivas campañas que por impedir que el gobierno aprobase una ley demencial, y no se presentaron en el senado ese día.
Sin embargo, Dodd consiguió hablar diez horas seguidas, como James Stewart en el famoso film, y gracias a ello consiguió que no se aprobase la ley. Increíble.
Definitivamente América está jodida. La pesadilla de Orwell ya casi es una realidad.


Es la primera vez que leo algo sobre este suceso, y no se que me turba más si que haya sucedido o que no se haga público algo semejante. Desde luego estoy de acuerdo con el comentario final de César, parece que cada vez están más cerca del 1984 o del reciente Year Zero de NIN. Y cuando veas las barbas del vecino cortar...

1 Comments:

At 5:23 p. m., Blogger danilefreak said...

hay un capítulo de "El Ala Oeste" en el que un senador "filibustea" durante todo el capítulo, habiendo jurado que antes moriría que dejar que se apruebe un presupuesto que dejaba de lado los fondos para niños con síndrome de Down (luego se descubre que un nieto suyo tiene down y no lo había dicho a nadie para no usar al chaval con fines políticos y los protas de la serie le echan un cable). El capítulo es hasta divertido, porque mientras no diga que ceda la palabra y mientras no deje de hablar y no pare ni para beber agua no le pueden retirar la palabra y, por tanto, la sesión del senado no concluye y no se aprueba nada. El tío se pone a leer libros, desde David Copperfield hasta recetas de cocina.

Vaya con el Dodd...

DANI S.

 

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